La Rosca de Reyes y su llegada a México es una tradición profundamente arraigada celebrada cada 6 de enero para conmemorar la llegada de los Reyes Magos al Niño Jesús. Su historia se remonta a antiguas costumbres europeas que han evolucionado a lo largo de los siglos, incorporando elementos locales y convirtiéndose en un símbolo de unidad y celebración familiar.
Orígenes Históricos
Los orígenes de la Rosca de Reyes se encuentran en las festividades romanas conocidas como Saturnales, donde se colocaba una moneda en un pastel. Quien la encontraba se convertía en “rey” por un día. Con la llegada del cristianismo, esta costumbre se transformó en una celebración de la Epifanía, que conmemora la adoración de los Reyes Magos al Niño Jesús. Durante el reinado de Luis XV en Francia, la rosca se popularizó como parte de las festividades navideñas y fue posteriormente llevada a España.
La Rosca de Reyes y su llegada a México
La Rosca de Reyes llegó a México durante el periodo colonial, adaptándose a las tradiciones locales. Aunque el pan comenzó a hacerse en el actual territorio mexicano con la llegada del trigo, las primeras roscas tardaron en aparecer. Según investigadores como Cristina Barros y Marcos Buenrostro, la costumbre de hacer roscas tiene su origen en Europa, pero fue traída por los españoles y arraigada primero en el centro del país antes de difundirse por todo el territorio.
La popularidad de la Rosca de Reyes en México comenzó a crecer en la década de 1930, coincidiendo con la migración de personas españolas que huyeron de la Guerra Civil. Este periodo marcó un aumento significativo en su consumo y elaboración.
Simbolismo y Tradiciones
La forma circular de la Rosca simboliza el amor eterno de Dios, sin principio ni fin. Los adornos de frutas secas y cristalizadas representan las joyas en las coronas de los Reyes Magos. En su interior, se esconde un muñeco que representa al Niño Jesús; quien lo encuentre debe organizar una celebración con tamales el 2 de febrero, Día de la Candelaria.
A lo largo del tiempo, la receta ha evolucionado. Originalmente, algunas versiones incluían habas o muñecos de porcelana. En años recientes, se ha sustituido el acitrón por otros ingredientes debido a su sobreexplotación.
La Rosca de Reyes no solo es un delicioso postre; es un símbolo cultural que une a las familias mexicanas cada 6 de enero. A través del tiempo, ha mantenido su esencia mientras se adapta a las preferencias contemporáneas. Celebrar esta tradición es recordar y honrar tanto las raíces históricas como el espíritu comunitario que caracteriza a México. La Rosca sigue siendo un elemento central en las festividades del Día de Reyes, promoviendo la convivencia familiar y el disfrute compartido entre amigos y seres queridos.