Todos hemos visto alguna vez esas grandes máquinas que hacen el elemento gastronómico más importante de México, claro, hablo de las tortillas, pero, ¿sabes cuál es su origen?
Como fin de reducir considerablemente el tiempo de preparación, en 1904, Everardo Ramírez y Luis Romero idearon un aparato para producir tortillas de forma masiva.
Como primer intento, se desarrolló una máquina que constaba de rodillos laminados que llevaban la masa hasta un comal.
Este aparato producía tortillas cuadradas, por lo que su éxito no fue el mejor, no fue sino hasta 3 años después, que Fausto Celorio produjo una nueva máquina automática: la actual tortilladora.
Poco a poco se fue innovando, y fue así como reemplazo el petróleo por el gas natural y lograba procesar 132 kg de tortillas por hora.
Inicialmente se lleva un proceso de nixtamalización, y este consta de mezclar el maíz con cal viva y agua, para después transformarse en masa.
Posteriormente la masa es aplastada, laminada y cortada para tomar la clásica forma circular, y es transportada a una banda de tres hornos para finalmente salir.
Su proceso de preparación por cada tortilla consta de 60 segundos.