Para nadie es extraño que la comida mexicana es una delicia y no solo lo decimos los mexicanos. Dentro y fuera de nuestro país en bien valorada y reconocen toda la riqueza de sabores que tiene.
Pero, ¿qué pasa cuando se fusiona con otra cocina? Eso fue lo que experimentaron dos excompañeros de escuela y ahora socios, en Perú. Combinaron platillos de su cocina con algunos de la mexicana y el resultado fue fabuloso.
Existen semejanzas entre ambas cocinas por el uso de los ingredientes para algunos platillos, como el chocolate o el maíz y eso les facilitó el trabajo para crear una carta capaz de atrapar al público peruano.
Ambos socios contaron que toman recetas o formatos mexicanos y los adaptan a sabores y combinaciones peruanas. Un ejemplo de ello es cuando las personas buscan lo que se conoce en México como tacos o enchiladas, pero al probar sus productos, se dan cuenta que son un punto medio entre ambas cocinas y quedan muy conformes.
Dentro del meú cuentan con tacos servidos en tortillas de maíz simples o en su versión crocante; nachos de amazónics, una cama de tortillas de maíz fritas en las que se sirve una combinación de cecina regional, plátano frito, cebolla, culantro y queso gratinado, y las quesadillas panka birria, una tortilla de maíz doradas rellenas de una preparación de carnes cocinadas con ajíes peruanos y de queso oaxaca fundido.