Carta de alumbramiento para l@s ena-morad@s

Por Xiuhpapalotl Mariposa de Llama Turquesa

Nací enamorada. Morada por falta de oxígeno y en-amor porque pese a las dificultades, elegí vivirme.

Una de las consecuencias de este alumbramiento, es que desde los 8 años recuerdo tener ansiedad y depresión. De la nada lloraba y mi madre creía que era normal. Y creo que yo también. ¿Cómo explicar ese algo que nada tiene que ver con tus sentidos? No era como decir “me duele aquí”. Me dolía el alma y en ese entonces desconocía que tenía una. La última crisis fue reciente, precisamente un día antes de mi cumpleaños. Me faltaba el aire y sentía una asfixia que llevó mi mente a la labor de parto de cuando estaba a punto de nacer. Cási no podía hablar, mis lágrimas brotaban con desesperación hasta que me dije: “esta vez puedes elegir coronarte y hacerlo diferente”. Y mi cuerpo comenzó a ceder.

Estudié Diseño Gráfico porque me acercaba, a las artes plásticas (vida pasada). Al salir de la universidad comencé a tener ataques de pánico, algunas veces me impedían salir de casa, o cuando lograba salir, a plena luz del día, sentía miedo absolutamente de todo. No manejaba nada bien el tema de la soledad y los desapegos (vida pasada) y en ese entonces estaba teniendo muchos cambios. Conseguí ayuda con una Psiquiatra maravillosa y tomé ansiolíticos y antidepresivos por un tiempo. Después conocí a un Psicoterapeuta grandioso que marcó un parte aguas en mi vida. Sin embargo sabía que había mucho más escondido en esas crisis emocionales.

Un día desperté llorando y sintiéndome terriblemente sola aún cuando escuchaba a mi familia hablando a lo lejos. Trataba por todos los medios de convencerme de estar acompañada, pero el vacío y la tristeza seguían allí. Ese día decidí a hacer la primer búsqueda profunda, y en una meditación me ví como un adolescente huérfano; sabía que era yo, sintiendo esa devastadora sensación de soledad. Nunca me pasó por la cabeza indagar otras posibilidades tan “intangibles”. Solía bromear diciendo que había sido X personaje, pero no era serio porque desconocía el tema de las vidas pasadas. Lo cierto es que a partir de ese momento jamás volví a sentirme así. Posteriormente en una práctica de Registros Akáshicos, logré verme como pintora y recordé los dibujos que hacía desde que tenía dos años y nadie se explicaba de dónde venía esa habilidad. En un sueño supe que fuí partera, entonces comprendí por qué he llorado las 80 veces que he visto el parto de mujeres desconocidas. Sé que habrá muchos excépticos y no pretendo convencerles. Deseo acaso compartir una esperanza de que sí se puede llegar al origen del origen y no sólo buscar adaptarse. Explorando el vasto universo que significa un Ser, he sanado una vida, mi vida.

Actualmente soy acompañante del alma, ofrendando entre varias alternativas la Terapia transpersonal para la energía integrativa, en la cual veo resultados sumamente rápidos, combinando las propiedades de algunos cristales Maestros, escencialmente de la Obsidiana y la sabiduría del Camino Rojo y el camino Maya Quiché. En estas sesiones, sin conocer al receptor, averiguamos junt@s el origen de su dolencia, que puede ser transgeneracional, subconsciente, producto de vidas pasadas, programa de trauma, etc. Sorpresivamente a esta terapia acuden conmigo muchos Psicólogos, pues comienzan a conectarse con el resto de sus cuerpos y a entender que no todo patrón de acción, emoción o pensamiento, procede del ser consciente. 

En esta oportunidad que se me da de compartir quiero decir:
– Sí se puede abatir la depresión y la ansiedad
– Está bien hablar del tema
– No estás loc@
– Está magnífico llorar aún cuando no sepas por qué
– Ese sentimiento va a pasar

Pero lo más importante sería decirte que a veces es necesario morir un poco, y perdernos y volvernos loc@s, para así, recordar nuestra misión aquí.

Sígueme y conectemos aquí

Related posts

Pachita: La enigmática chamana mexicana

Kingo Nonaka: el médico samurai de la Revolución Mexicana

Amelio Robles Ávila: El Coronel Trans de la Revolución Mexicana