El copal se ha utilizado en diferentes culturas al considerar que purifica el ambiente y aleja los malos espíritus, y cómo no, si posee varias propiedades medicinales y espirituales.
Además de que se usa como agradecimiento u ofrenda en diferentes rituales y eventos religiosos principalmente de Semana Santa y Día de Muertos.
Algunos aman y otros odian el olor, pero sin duda se ha vuelto parte de nuestras tradiciones y basta detectarlo para trasportarnos a noviembre, aunque su uso no es exclusivo de las ofrendas.
La Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), explica que el copal es una resina aromática que se usa como incienso. Ésta se obtiene de árboles o arbusto, a los cuales también se les llama copales, que pertenecen al género Bursera, cuyos aceites y resinas aromáticas han sido apreciados desde la antigüedad.
En la época prehispánica, el árbol de copal era conocido como copalquáhuitl, mientras que la resina olorosa era conocida como copalli, cuyo significado literal es incienso.
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— SEMARNAT México (@SEMARNAT_mx) August 14, 2018
El médico y botánico Francisco Hernández, hizo un estudio sobre el copal en el siglo XVI, aclarando que no se trataba de una goma en específico, sino de distintas gomas que se designaban bajo un mismo nombre y servía para aliviar las jaquecas.
Otros cronistas españoles narran que el copal tenía una fuerte vinculación con la fertilidad y el agua, por lo que se llegó a representar a Tláloc con una bolsa de copal.
Además de la curación del dolor de cabeza, el copal es usado:
- como analgésico general
- ayuda en el tratamiento con dolores de huesos
- para el malestar de útero
- contra el dolor de muelas
- contra el padecimientos del estómago
- contra quemaduras
Sin embargo, su principal uso es como purificador y como medicina de enfermedades espirituales, las cuales, según la cosmovisión indígena, pueden manifestarse en enfermedades físicas.
