Se dice que tan sólo a lo largo de México existen por lo menos 370 variedades de tamales y los pulacles veracruzanos son uno de ellos.
La gastronomía de Veracruz es diferente en cada región del estado; no es para menos, conecta al norte, el centro y al sur del país. Por si fuera poco, es un estandarte de la comida mestiza al integrar ingredientes mexicanos y europeos que llegaron en tiempos de la Conquista.
Los pulacles se preparan para las fiestas de Semana Santa, para honrar a los patronos, en el Día de Muertos, el de reyes y hasta para las ceremonias de siembra o cosecha. Es un símbolo de festejo que nunca falta.
Gracias al suelo fértil de aquel rico estado, que además está enriquecido por contar con litoral y con zona montañosa, la siembra de la milpa es muy común.
La milpa es la base de su alimentación que por supuesto está presente en los pulacles con uno de sus ingredientes principales, el maíz. Además en el relleno lo encontramos con los frijoles, calabaza, chayote y cilantro.
Estos vegetales se sazonan en una salsa que incluye piñón, jitomate, ajonjolí, chiltepín y chile jalapeño. Van envueltos en hoja de plátano o de maíz y también los puedes encontrar en esta región con el nombre de tamales de frijol.
