Durante años, encontrar una Yoli, el refresco de limón, era una odisea, en caso que no estuvieras en alguna región de Guerrero, porque no había por ningún otro lado; pero hoy, este hecho ya es historia.
Fue en Taxco, Guerrero donde todo surgió, en 1918 que Don Manuel Castrejón emprendió un pequeño negocio local , poco a poco su bebida comenzó a tener gran aceptación, su nombre era “La vencedora”.
La bebida comenzó a venderse fuera de la comunidad, en 1933 cambió su nombre a Yoli, en honor a la hija que tuvo con su esposa Conchita Díez.
Castrejón creó el refresco a base de ralladura de cáscara de limón con el jugo del limón hervido y azúcar, después le ponían una canica y la tapaban.
En un comienzo las botellas en las que se envasa el refresco eran únicamente de vidrio, para sellar las botellas se colocaba una canica en la parte superior y posteriormente se fijaba con brea, un pegamento muy conocido de esa época.
Para abrir la botella tenías que agitar el refresco para provocar las burbujas de gas para que la canica subiera y así se destapaba.
Para 1950 se creó la primera planta productora en Acapulco, después a Iguala.
Años más tarde, grupo Yoli se modernizó e invirtió capital en su infraestructura. gracias a esto se pudo integrar el proceso de inyección y soplado de envases PET a su cadena de producción.
En 2013, Grupo Yoli fue adquirido en su totalidad por The Coca-Cola Company. Se estima que el monto de la transacción fue de casi 700 millones de dólares
