Hace 11 años la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), aceptó la propuesta “El paradigma de Michoacán” declarando a la gastronomía mexicana Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Hoy, son varios los platillos en los que se conjugan la triada mexicana: el maíz, el frijol y el chile, pero sin duda hay unos más famosos que otros y aquí te compartimos el quinteto más representativo y por supuesto, el más rico:
- Pozole: Es un caldo hecho a base de grano de maíz , existen variaciones de él por todo el territorio mexicano. A este platillo se le puede acompañar con diferentes ingredientes, que varían según la zona y costumbres.
- Mole: Tuvo una importante adaptación en Puebla durante el siglo XVII en la que el chile no dejó de perder su protagonismo, pero fue enriquecido con un ejercito de ingredientes que deben ser combinados a ala perfección.
- Tamales: Estas creaciones reúnen un extenso surtido de sabores, técnicas y tradiciones; se calculan alrededor de 5,000 variedades que han surgido de las regiones y localidades de todo México. Reproducirlos fuera del país es toda una hazaña, nunca quedarán tan ricos.
- Chile en Nogada: De fama internacional, el patriótico es de los platillos más solicitados por los extranjeros y más esperados por los mexicanos que sólo puede degustarse durante la temporada de granada y nuez.
- Taco: No podíamos dejar a una lado el más sencillo y al mismo tiempo, el más complejo, platillo. El taco cumple con los tres elementos esenciales de la gastronomía nacional. Se puede realizar con pastor, carnitas, longaniza, barbacoa, sesos y mucho más.